viernes, 18 de septiembre de 2009

LOS DUROS GOLPES DEL 16 DE SETIEMBRE CONTRA EL PUEBLO

LOS DUROS GOLPES DEL 16 DE SETIEMBRE CONTRA EL PUEBLO

Para el pueblo argentino, el 16 de setiembre, a pesar de estar próxima al comienzo de la estación más linda del año, la esperada primavera, resulta muy cara a sus sentimientos, puesto que ese día, se produjeron tristes acontecimientos, que marcaron a fuego nuestra historia: la interrupción del gobierno nacional y popular del Gral. Perón, a través de un cruento golpe militar autodenominado “Revolución Libertadora”; en la madrugada de ese día de 1974, los asesinatos del ex Gobernador de Córdoba “negro” Atilio López, un luchador y auténtico representante sindical, junto a su amigo y compañero el contador José Varas, acribillados por la Triple A; y en La Plata, en horas de la madrugada de ese mismo día pero de 1976, el secuestro y la desaparición de jóvenes estudiantes secundarios, hecho conocido como la “Noche de los Lápices”.
Un 16 de setiembre de 1955, después de otros golpes frustrados, entre los que se contó con la participación del general Benjamín Menéndez, apellido “tristemente célebre” por su historia golpista, se producen levantamientos militares en distintos puntos del país, con una proclama desde Córdoba, que incita a luchar hasta el fin, y cuenta con el apoyo de la marina, a cargo del vicealmirante Isaac Rojas, luego designado vicepresidente, y los comandos civiles armados, nexos con los golpistas, y la colaboración y en el menor de los casos el silencio cómplice de integrantes de los otros partidos políticos…, la que se autodenominó “Revolución Libertadora”, que restauró el poder de la oligarquía conservadora, aliada económica y políticamente al imperio norteamericano, dirigida por el “nacionalista católico” Gral. Eduardo Lonardi, quien asume la presidencia de facto, con la famosa frase “ni vencedores, ni vencidos”, lo cual provoca diferencias y antagonismos, durando sólo 52 días, para luego ser reemplazado por un golpe palaciego efectuado por el “liberal” Gral. Pedro Eugenio Aramburu, transformándose lisa y llanamente en “Revolución Fusiladora”, con la intervención de los sindicatos y la CGT, la proscripción del peronismo, la derogación de la Constitución de 1949, los fusilamientos del Gral. Juan José Valle, Cogorno, entre otros…y de varios civiles en el basural de José León Suárez, para enumerar algunos hechos más trascendentes. Las atrocidades cometidas por ese golpe y los que se sucedieron potenciándose, deberían hacernos tomar conciencia, sobre la importancia de la defensa de la democracia, ante cualquier intento golpista.
Unos cuantos años después, a los asesinatos del Padre Carlos Mujica y el Diputado Ortega Peña, entre otros…, en aquella mañana del 16 de setiembre de 1974, solos e indefensos, muren acribillados el “negro” Atilio López, junto a José Varas, sumándole otro crimen, a los cometidos por la Alianza Anticomunista Argentina (AAA) dirigida por el miserable y embustero López Rega. El “negro” Atilio López, un auténtico militante del campo nacional y popular, defensor inclaudicable de la noble causa de los trabajadores y de los oprimidos, participó en la Resistencia Peronista; un comprometido dirigente sindical, líder de la legendaria Unión Tranviarios Automotor, llegó a ser Secretario General de la CGT Córdoba; sin dudarlo, durante la dictadura de Onganía, Junto a l dirigente Raimundo Ongaro, protagonizó el plan de lucha de la CGT de los Argentinos, siendo uno de los principales referentes; y junto con Elpidio Torres y Agustín Tosco, fue decisivo en la gesta popular del “Cordobazo”, transformándose luego con la vuelta de la democracia, en el primer y único representante del Movimiento Obrero, electo Vicegobernador de Córdoba, junto a Obregón Cano, hasta el “Navarrazo” que lo despojó del poder. El asesinato del “negro” Atilio, un inquebrantable líder de masas con vocación de lucha, los personeros de la antipatria asestaron un certero golpe al movimiento nacional y popular, prenunciando el genocidio del 24 de Marzo de 1976. Su conducta y su ejemplo de vida, nos compromete una vez más, a sumar esfuerzos en la reconstrucción del movimiento nacional y popular.
En plena dictadura genocida, autodenominada “Proceso de Reorganización Nacional”, en la madrugada del 16 de setiembre de 1976, en la ciudad de La Plata, son secuestrados, torturados y desaparecidos, un grupo de jóvenes estudiantes cuyas edades oscilaban entre 16 y 18 años, casi todos integrantes de la Unión de Estudiantes Secundarios, permaneciendo varios desaparecidos hasta la fecha(Claudio de Acha, María Clara Ciocchini, María Claudia Falcone, Francisco López Muntaner, Daniel A. Racero y Horacio Ungaro) y otros que lograron sobrevivir(Gustavo Calotti, Emilse Moler, Patricia Miranda y Pablo Díaz, cuyo testimonio ha sido fundamental para la reconstrucción y denuncia de los hechos, además de participar en el juicio a la Juntas Militares y el rodaje de la película), por reclamar por la reinstalación del boleto estudiantil secundario, suprimido por la última dictadura militar, hecho que pasó a la historia como “La noche de los lápices”. Cabe acotar que entre los miles de desaparecidos de esa época, se cuentan más de 250 los adolescentes que tenían entre 13 y 18 años. Partiendo de la premisa de que “son deberes de un pueblo, defender sus derechos”, el accionar de estos jóvenes, constituyen un claro ejemplo de participación estudiantil y defensa de sus derechos, a los cuales la ciudadanía debe rendirle un merecido homenaje.
A varios años de aquellos tristes acontecimientos, los cuales nos deberían haber dejado enseñanzas, algunos diputados y senadores elegidos por el pueblo, coincidiendo con o siendo parte de lo más reaccionario del país y por su fanatismo anti K, o respondiendo a intereses de corporaciones antipopulares, transformándose una vez más en productos de campañas mediáticas, pretenden frenar el carro de la historia, negándose a cambiar una “ley de radiodifusión” de la dictadura, que sólo beneficia a unos pocos. Con excusas y artilugios inexplicables, se niegan a discutir y aportar modificaciones para la sanción de una “nueva ley de medios audiovisuales”, que aún con errores, beneficiaría a la mayoría de los argentinos, debido a que pone límites y es antimonopólica; posibilita la participación de sectores marginados, entre ellas los pueblos originarios; fomenta la educación, protegiendo a la infancia y a la niñez, fomenta el cine argentino, la producción local, regional y nacional…. Esta negativa nos induce a pensar que necesitan ocultar sus intereses antipopulares, su cobardía ante la presión o el recibo de “coimas”. Su actitud coincide, y por eso se juntan, con la inmoralidad, la traición y estafa al pueblo, de forma manifiesta, y en determinados momentos asumiendo actitudes que podrían definirse como golpistas, de quien fuera votado para acompañar en la fórmula presidencial, para la ejecución de un programa de gobierno nacional y popular, del cual hoy reniega… ¡Quién traiciona una vez, lo va a repetir tantas veces, de acuerdo a su conveniencia!

Realdo Santiago GASTALDI
Secretario General –Córdoba-
MOVIMIENTO DE UNIDAD POPULAR
FRENTE PARA LA VICTORIA